EL AUTOR es escritor, poeta y profesor universitario. Reside en Santo Domingo.o Entró a mi oficina esquivo, como si finalmente fuera ahí donde acababa todo. El día anterior me había llamado a través de una persona conocida, y empinado sobre el deber de contribuir a la vida cotidiana, me había dicho que él sabía cosas de lo que ocurrió realmente en las elecciones del 16 próximo pasado. En la refriega de la guerra comunicacional que se abrió después de la suspensión del torneo electoral, y en un mundo líquido (Zigmunt Bauman), uno suele mirar con toda sospecha el juicio del otro. Pero dije que sí. Al entrar me estremeció, porque afirmó que era del DNI. Tenía ante mí un papel curiosamente ambiguo, en el mismo instante que comenzó a hablar: